Hay rutas terrestres, mas o menos transitables, y autopistas en el cielo que siguen los aviones para conquistar lugares lejanos.
Pero el mar, también tiene sus códigos y un vocabulario particular que hay que respetar.
Y Cádiz es mar; la luz del mar que dicen «marketinianamente» para designar un cruce de caminos húmedos y salados.
Un lugar, el estrecho de Gibraltar, donde se unen el océano Atlántico y el mar Mediterráneo que juegan una partida de cartas a ver quién es más bello.
Recuerdos
Pero da igual quien gane porque el mar está ahí, con sus olas iguales, pero distintas, con su océano cerúleo y la promesa de una materia prima convertida en atún de almadraba.
Y, por si eso fuera poco, está el viento, que intenta colarse por este pasillo natural a veces con tanta fuerza que duele.
Ese viento de Levante que sube y baja en tres días, como quien se enfada con la humanidad de vez en cuando, pero sin rencor.
Estas líneas -perdonadnos por la vena poética- fueron escritas nada más volver de nuestro viaje a Cádiz y ahora, pasado cierto tiempo, no hemos quitado ni una coma.
El Alférez
Y es en esa zona donde se pesca el atún de almadraba, donde se impone la cocina marinera como la que practica el restaurante el Alférez en plena playa del Palmar, cerca de Vejer de la Frontera.
Un lujo para la vista y para los sentidos de quienes sentimos devoción por el mar y por la buena gastronomía.
Fruto de ello este restaurante que regentan Paco Alférez y su hermana Beatriz, que es quien se ocupa de los fogones, acaba de recibir un sol de la guía Repsol.
Un sol que podrían ser dos o tres… o mil, si miras a la playa desde una de las mesas de su terraza desde donde se mastica hasta la sal del mar.
La luz del mar
El lugar es fantástico, como podréis ver en las fotos y vídeo, y la cocina que aquí se maneja tiene mucho que ver con los túnidos y el pescado y marisco, en general.
Todo exquisito y todo inolvidable. La parpatana de atún, las gambas, el arroz con cigalas, el centollo meloso y cremoso o los lomos de sardinas.
Pero es que aquí todo gira en torno al mar y a su dios Neptuno cuyo tridente emula el emblema del restaurante el Alférez, con tres tenedores/pez símbolo de los tres hermanos que fundaron el restaurante.
Y es que el Alférez es «la luz del mar» como reflejo de Cádiz en una especie de espejo marino que se ha convertido en referente de quienes rinden culto a la gastronomía marinera de alta calidad.
El restaurante fue reformado en 2018 y desde entonces luce blanco inmaculado, como mandan los cánones.
Perfil de comensal
En los días de mayor afluencia son capaces de atender hasta 250 comensales que se reparten de manera homogénea.
De mayo a junio y de septiembre a octubre, lo «cortejan» turistas extranjeros y en temporada alta (julio y agosto) los españoles, como no.
Sin embargo, lo mejor para poder ser atendido en tiempo y forma (y encontrar mesa) es seguir la estela de «los guiris» y no aturullarse en julio y agosto.
Pases de oro
En nuestra visita al restaurante el Alférez probamos unas sabrosas y sorprendentes sardinitas ahumadas con requesón y confitura de tomate verde.
Estaban tan ricas y sabrosas que ya empezábamos a sentir esas mariposas preludio de que lo que se avecina es más que prometedor.
Por eso tampoco pudimos resistirnos a unas gambas con sal negra recién llegadas de la lonja de Conil, que es donde Paco Alférez «hace la compra».
Así que ya os podéis imaginar que aquí «el género» no es que esté fresco, sino que es de champions league.
En este repaso gastronómico es lógico que el atún de almadraba estuviera muy presente.
Manjar de dioses
Y es que el atún aquí es el rey del mar y desde la cocina de el Alférez, año tras año, siguen casi con la mirada el paso del atún rojo por el estrecho de Gibraltar.
Una delicatesen que, en esta tierra milenaria de almadrabas, trabajan con la paciencia y el cariño de la gastronomía tradicional almadrabera y con la creatividad, la pasión y la fusión de la nueva cocina.
Y en esta fiesta del atún no solo te homenajean con cortes en crudo de cada una de las partes que atesora este mágico pescado, sino que los cocinan de mil maneras.
Cortes en frío
Gastronomoyviajero probó algunos de esos cortes en frío como el tataki, el tartar, sashimi, parpatana…y aunque todo estaba espectacular la ganadora, por goleada, fue esta última por su cremosidad.
Además llegaban servidas con un variado de algas, jenjibre y una mayonesa de soja, que se unía a la fiesta sin ningún pudor.
Los diferentes cortes de atún nos hicieron ver el cariño y la destreza con la que se homenajea aquí este túnido.
Sorpresa
Pero Beatriz, la cocinera de El Alférez, nos tenía reservada una sorpresa desafiante: croquetas de atún con tomate y mojama.
La mojama, llega aderezada con piñones y está de 10, las croquetas de 10,5 y el tomate, ay el tomate, de 11. Brutal.
Enloquecidos ya con estos pases tan impresionantes, mirabas el Atlántico, allí, enfrente, y el gozo se convertía en placer inigualable.
Arroz
Casi tanto como el arroz con carabineros, cremoso, insultantemente rico, en un almuerzo que ya sea por el océano, por la luz del mar, por lo enamorados que estamos de Cádiz o por las sabias manos de la cocinera, se ha hecho un hueco para siempre en nuestra memoria.
Y si comenzamos con pasión, el postre no iba a ser menos. Por eso la copa de fruta de la pasión con helado de coco puso el final perfecto a un día genial.
El colofón fue el paseo por la playa del Palmar, al atardecer, mientras el restaurante El Alférez iba preparándose para el servicio de cena.
Todo en calma, todo en silencio, salvo por el ir y venir de las olas del océano, tras el bullicio del pase del almuerzo.
Así que si visitas Cádiz no se te olvide pasar por el Alférez. Te juramos por Neptuno que te arrepentirás si no lo haces.
Nuestro menú
| Entrante | Sardinitas ahumadas con requesón y confitura de tomate verde |
| Entrante | Gambas cocidas con sal negra |
| Entrante | Cortes en frío de atún rojo de almadraba |
| Entrante | Croquetas de atún con tomate |
| Entrante | Mojama con piñones |
| Principal | Arroz con carabineros |
| Postre | Fruta de la pasión con helado de coco |
| Vino | Barbazul blanco. Chardonnay de la sierra de Grazalema. Bodega Huerta de Albalá |
Restaurante El Alférez. Paseo Maritimo, s/n El palmar, 11159, Vejer De La Frontera. Cádiz. Telf. 626 58 08 95. fcoalferez@gmail.com
Cádiz imprescindible💯
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