Hablar de Jerez es hablar de caballos y bodegas. Pero es que, además, esta ciudad gaditana pertenece a la Red de Ciudades Europeas del Caballo, Euroequus, lo que no solo ha servido para desarrollar una industria muy potente a su alrededor, sino para posicionar a Jerez como referencia internacional.
Pero distinguir el caballo andaluz del español y cartujano -que se remonta al siglo XV- no es fácil ni para los expertos.
En todo caso, y eso es lo importante, el caballo en Jerez sirve también para entender la idiosincrasia de este territorio donde se agrupan algunas de las más importantes ganaderías y yeguadas de España.
Fundación
Y para disfrutar de su belleza, practiques o no la equitación, no hay nada mejor que asistir al espectáculo «Cómo bailan los caballos andaluces» en la Fundación Real Escuela Andaluza del Arte Ecuestre.
Una Fundación Real Escuela donde «residen», oficialmente, 120 caballos.
En el espectáculo los caballos bailan de verdad…y saltan, y corren, y trotan…es todo tan plástico y visual que, si no lo has visto, te sorprenderá.
En nuestra visita, pudimos recorrer las caballerizas, el museo de los carruajes, enganches, guarniciones, sillas, -una para cada tipo de jinete- arreglo de material y hasta el backstage de los protagonistas del espectáculo: los caballos y sus jinetes, amazonas y cuidadores.
Vestuario
Centrándonos en el espectáculo, el repertorio se compone de varias fases ambientado con música netamente española y un vestuario a la usanza del siglo XVIII.
En cada representación, se realizan de seis a ocho coreografías y todas ellas son maravillosas, cada una en su estilo desde la doma clásica y vaquera a otras suertes como los enganches (carruajes) o variantes de la equitación tradicional.
Cinco fases
«Como bailan los caballos andaluces» consta, como hemos señalado, de cinco fases con una intermedio y descanso a la mitad del espectáculo que en total dura una hora y 30 minutos.
Primero nos muestran cómo es la doma vaquera (practicada en el manejo de las reses) donde el jinete, con las riendas en una sola mano, conduce al caballo por la pista, al paso y al galope, cambiando de ritmo y realizando giros y arreones.
La segunda exhibición es la doma clásica. La tercera es la de los llamados enganches en los que los caballos van tirando de los carruajes. La cuarta es la de trabajos a mano y la ultima el carrusel.
En la disciplina de los trabajos a mano, el jinete va a pie y los caballos realizan ejercicios de Alta Escuela y otros de la equitación antigua tradicional como levadas, cabriolas, corvetas, piaffer (entre pilares), paso Español y en riendas Largas.
Finalmente, en el carrusel, que es el número final, un grupo de caballos y jinetes, al unísono, realizan por la pista ejercicios de equitación avanzada.
Mas pistas
Lo que las guías no dicen
El caballo español o PRE (Pura Raza Española) es una raza que proviene de Andalucía y fue el más apreciado en Europa durante varios siglos.
Por eso es fácil ver retratos de la época en la que reyes y nobles aparecen montando caballos españoles.
Estos ejemplares son descendientes de los caballos de Iberia y por eso está entre las razas equinas más antiguas del mundo
Iberia
De hecho, se cree que el caballo español existe en la Península Ibérica desde hace unos tres mil años.
Hay documentos, del siglo IV a.C., donde se habla de este animal por pensadores como Aristóteles, Plinio el viejo o Virgilio.
El caballo de Iberia era famoso y reconocido en todo el mundo por su versatilidad, y por eso fue exportado para cruzarlo con otras razas fuera de nuestras fronteras.
Sin embargo, parece ser que fue Felipe II quien más se preocupó por los equinos hasta el punto de planificar la mejora de la cabaña existente en España.
Este labor, consiguió importantes logros en la selección del pura raza español y que se apreciara en todo el mundo por su nobleza, versatilidad, belleza, gallardía y docilidad.
Donde comer
Después del espectáculo, que suele finalizar antes de la comida, lo mejor es buscar un buen restaurante para almorzar.
Y, aunque en Jerez la oferta es amplia, la mejor en relación calidad precio está, sin duda, y también es nuestra recomendación, en el restaurante Avanico, del chef Fran Oliva; un lugar con vocación de gastrobar donde podrás tomar tapas o sentarte a disfrutar de un ágape en su coqueto comedor.
Otras opciones son Atuvera, un local situado en las antiguas caballerizas de una casa Palacio del Siglo XVI donde se profesa un amor loco por la extinta Lola Flores, El Fogón de Mariana (con varios locales) y el Trastero.
Y ya en otra dimensión y otro precio están los estrellas Michelin Lu, cocina y alma (Juanlu Fernández) y Mantúa y Albalá, el primero con estrella y el segundo gastrobar, del chef Israel Ramos.
Video completo de Cómo bailan los caballos
