Hay dos restaurantes Avanico: uno en el Puerto de Santa María y otro en Jerez y, fue, en éste último en el que pudimos probar la cocina del chef Fran Oliva.
Porque Avanico, con «uve», es un lugar de encuentros y donde a su terraza, a su barra o a su pequeño comedor se viene a charlar y a disfrutar.
Como en los otros restaurantes gaditanos que tuvimos el privilegio de visitar, Fran Oliva también se decanta por la cocina tradicional actualizada o con toques de autor.
En la sala, cuadros y cojines de hojas con verde y azul por todos lados…Y una vitrina con abanicos, por supuesto, justificando el nombre del local.
Matrimonio
En el comedor, casi siempre completo, es fácil casarse si el matrimonio es una tosta de anchoa y boquerón con alboronía y alioli.
Simple, sencillo y rotundo para empezar a abrir boca.
Seguidamente, como no, Fran Oliva nos propuso un tartar de atún rojo de almadraba con wasabi y wakame con sus respectivas tostas de pan.
Nuevamente, y tal y como suele ocurrir en Cádiz, el atún es de primera y por eso este plato -aunque sea recurrente- es difícil que falle; y no falló.
Jornadas gastronómicas
Ya señalamos antes que tiene otro local en El Puerto de Santa María y da la casualidad que todos los jueves de este mes de noviembre se van a celebrar unas jornadas gastronómicas dedicadas a las regiones de Cantabria, Segovia y Cádiz.
Mañana jueves 10 le toca el turno a Cantabria, el 17 a sabores de caza y setas, el 24 a Segovia y el 1 de diciembre a Cádiz.
De las cuatro jornadas, dos de ellas estarán maridadas por las bodegas portuenses Osborne y Caballero, y en el resto los menús se armonizarán con vinos de González Byass, Emilio Moro, Valdespino, Pernod Ricard y en todas cerveza Cruzcampo.
Las plazas son limitadas y se puede reservar en el teléfono: 685 918 401
En carta
Siguiendo con la carta del restaurante también puedes optar por un surtido de setas al amontillado con huevo a baja temperatura, un salteado de «Boletus edulis”, un arroz con codillo o un brioche de pato.
En nuestro caso, la incursión en el mundo micológico fueron unas chantarellas salteadas con láminas de jamón.
Nuevamente, un plato sin complicaciones pero ejecutado a la perfección por el jefe de cocina Isaac Jiménez.
Erizo
Pero, como muchas veces ocurre con la lotería, el premio gordo y el segundo se hicieron esperar un poco hasta que apareció un erizo con huevas y cabracho que estaba espectacular.
Incluso para quien tenga algún reparo en tomar erizo, éste tiene tanta combinación de sabores que es irresistible para el paladar.
El segundo premio fue para otro plato de nivel como la flor de alcachofa con vetas de bacon, más modesto que el anterior, pero de gran factura y suavidad.
El fondo de setas con cebolla y un toque de foie no solo es un gran acierto, sino que está delicioso.
De postre una tarta de queso atemperada que estaba muy buena pero que no superaba a otras que hemos probado anteriormente.
Así y todo está bien ejecutada y a la que no se le puede poner ningún pero.
La carta es concisa y el personal muy amable, y si hubiera que elegir una frase para resumir las características del local sería el de que «es un lugar entrañable».
Por todo lo dicho, Avanico Jerez, un bib gourmand de la guía Michelin, es un lugar muy recomendable tanto para tapear como para comer.
Nuestro menú
- Tosta de anchoa y boquerón con alboronía y alioli.
- Tartar de atún rojo de almadraba tratar de con wasabi y wakame
- Chantarellas salteadas con láminas de jamón
- Erizo con huevas y cabracho
- Flor de alcachofa con bacon y foie
- Tarta de queso horneada y templada
- Vino. Entrechuelos. Miguel Domecq. Chardonnay 2021