Alicante: qué hacer en la ciudad que adoran los turistas extranjeros

Alicante es, sin duda, uno de los destinos más atractivos de España para el turismo extranjero.

Su clima, su mar y su tranquilidad son acicates mas que suficientes para que este idilio perdure «per in secula seculorum».

Nada por aquí y nada por allá. Y es que los monumentos emblemáticos no son lo más destacado de Alicante.

Sin embargo, no es menos cierto que solo con su Explanada de España (también conocida como paseo de las palmeras), el puerto dentro de la ciudad y el castillo de Santa Bárbara son alicientes más que atractivos para visitarla.

Si a eso le unimos una gastronomía cada vez más excelsa y sobresaliente, pues ¡para qué queremos mas!

Explanada de España
Playa de Postiguet

Beso mediterráneo

La ciudad, con una población de unos 350.000 habitantes, está situada entre el cabo de las Huertas y el de Santa Pola.

Por eso el Mediterráneo la «besa» cada día como a ninguna otra ciudad costera de Levante.

Además, ese mismo mar «la acaricia» y modela su clima de tal modo que te dan ganas de repetir ese eslogan de que es la mejor «terreta del mundo».

Extranjeros

Los extranjeros, muchos de los cuales llevan sandalias con calcetines, pero que no son tontos, se han dado cuenta de que Alicante reúne las condiciones imprescindibles pasa asegurarse unas vacaciones o un buen retiro en caso de Jubilación.

Lo sabía el emperador Diocleciano cuando se marchó a Split (Croacia), y lo saben los británicos, franceses y alemanes que se agolpan en la playa del Postiguet para coger todos los rayos de sol posibles, a veces con desmedida avaricia, si atendemos a que muchos acaban con el cuerpo color cangrejo.

Pero aquí nada importa, porque esta capital de la Comunidad Valenciana tiene una luz solo comparable a la de Cádiz, que mira al Atlántico y al Mediterráneo sin inmutarse.

El puerto de noche

Qué ver

La Explanada

Uno de los lugares que ver en Alicante ya se ha mencionado.

Se trata de la Explanada de España: una avenida de poco más de 500 metros que discurre paralela al puerto y que está marcada por decenas de palmeras (de ahí el apodo de paseo de las palmeras).

Pero con tener unas vistas excepcionales, lo que más llama la atención es su suelo hecho con seis millones de teselas (baldosines) cuadradas de colores rojo alicante, crema marfil y negro marquina que imitan las olas del mar.

Tal vez por eso el Mediterráneo le devuelve las caricias ya mencionadas.

Además, está situada junto al puerto con lo que, si no te contentas con los puestos de artesanía, de retratos y terrazas de bares y restaurantes, puedes entretenerte mirando los veleros.

Ocean race

Precisamente, en el puerto está otra de las atracciones que deberías visitar (y es gratuito) como es el museo de la World Ocean Race, una competición de barcos que ya acogió la ciudad en 2008, luego otra vez en enero de este año y que está programado acoja una nueva edición en 2026.

El museo visitable -imprescindible si te gusta navegar- es el cuartel general de la organización de la prueba.

The Ocean Race nació como Whitbread Round the World Race en 1973 y se transformó en Volvo Ocean Race entre 2001 y 2018.

Hoy, The Ocean Race se ha convertido en la vuelta al mundo de referencia en el deporte de la vela.

Ayuntamiento

Ayuntamiento

Cerca del puerto y de la Explanada se encuentra otro de los lugares de interés, como es el Ayuntamiento,

Y a pocos metros de la plaza del Ayuntamiento se encuentra la Concatedral de San Nicolás, edificada sobre los restos de una mezquita y considerado el templo religioso más importante de Alicante.

El edificio actual fue construido entre 1616 y 1662 en estilo renacentista herreriano, aunque su claustro es del siglo XV y fue realizado en estilo gótico valenciano.

Barrio de Santa Cruz
El barrio y sus casas con flores

Santa Cruz

Desde ahí, se puede acceder al barrio más famoso de Alicante: el de Santa Cruz.

Situado justo en la falda del castillo, en la ladera del monte Benacantil, es el más emblemático de la ciudad.

Aparte de por sus espectaculares vistas (está en la parte más alta) llaman la atención sus coloridas callejuelas y sus casas encaladas.

Vistas de la ciudad desde el barrio de Santa Cruz

Otrora barrio de pobres, se ha convertido en el reducto bohemio de la ciudad con bares y restaurantes para ir de tapas o a tomar copas.

Aunque la época más idónea para visitar el barrio sea durante las Cruces de Mayo, muchas de las casas conservan sus flores casi todo el año para regocijo de los turistas.

Postiguet y el castillo de Santa Bárbara
El puerto desde el castillo

El castillo

El castillo de Santa Bárbara es una mole imponente desde las que se divisa todo (pero todo) el perímetro de Alicante con un ángulo de 360º.

Las vistas son hegemónicas en cualquier momento del día, pero al atardecer los colores anaranjados que deja el sol conforman una imagen única.

Vista interior desde el castillo

El castillo está a 167 metros de altura sobre el nivel del mar, y nunca mejor dicho porque la playa de Postiguet está justo debajo.

Esta fortaleza medieval tiene sus orígenes a finales del siglo IX, durante la ocupación musulmana, aunque fue reconquistada por Alfonso de Castilla el día de la festividad de Santa Bárbara y de ahí su nombre.

Interior

En el interior del castillo, al que se accede desde el barrio de Santa Cruz (andando), en autobús o desde el ascensor situado frente a la playa, disfrutarás de tres zonas de diferentes épocas.

En una de ellas se encuentran los restos árabes, en otra las reformas ordenadas por el rey Felipe II, en 1580, y la tercera perteneciente al siglo XVIII.



Maria José San Román en Monastrell

Comer

En cuanto a donde comer, lo cierto es que la restauración tanto de la provincia como la de la capital han mejorado de forma ostensible durante los últimos años.

De manera que a los clásicos y de calidad como Nou Manolín, Monastrell, el Portal o los puestos del inmenso Mercado Central, han sido surgiendo alternativas de gran calado.

El equipo de Tabula Rasa

Una de ellas es, sin duda, Tabula Rasa. Este restaurante, comandado por «dos ex de la Ereta», como el cocinero Rafael Molina y el jefe de Sala Juan Pablo Valencia, es uno de los «nuevos» más recomendables.

Otro es Alma cocina viajera. Aquí, incrustado en unas galerías de la alimentación de la calle Churruca, el chef Ernesto Frutos emula al tres estrellas David Muñoz, con unos platos excelsos y sorprendentes.

Ernesto Frutos y su ayudante en la cocina de Alma

En este apartado de novedades recomendables también figura Steki, la Taberna y Terraza del Gourmet (del grupo Monastrell de la familia Perramón/ Maria José San Román), los Manero del grupo El Portal y, desde luego, el Baeza y Rufete con una estrella Michelin.

Manero Mollá siempre a tope de gente

Mercado central
Castillo desde Santa Cruz


Coordenadas


2 comentarios en «Alicante: qué hacer en la ciudad que adoran los turistas extranjeros»

  1. Muy buen post, Carlos. Das una buena píncela sobre Alicante. Lo cierto, es que Alicante ofrece una muy buena oferta gastronómica. Enhorabuena!!!

    1. Lo único es que no me llamo Carlos, sino Juanma, pero me alegra que te haya gustado tanto el reportaje. Lo escribimos con cariño y hasta pasión

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *