El restaurante Pagus, pasta y grill, no es un estrella Michelin (ni aspira a serlo) ni tan siquiera se menciona en las guías gourmet, pero casi siempre está lleno.
¿La razón? Pues que la comida, en general, está muy bien si no eres un gourmet empedernido que se fija en detalles que, «para el vulgo», no tienen la menor importancia.
Pagus parece un restaurante italiano por muchas de sus elaboraciones, pero si lo combinas con el grill entonces podría ser un argentino.
Así que dejaremos que tu lo juzgues cuando leas este reportaje en el que te contamos la visita que hicimos movidos por un «chivatazo» de nuestra amiga Mayte.
Pasta casera
Dicen los propietarios -que tienen otros dos locales en Crotone (Italia) y León- que Pagus es famoso por su comida casera, especialmente su pasta fresca hecha a mano y carne a la parrilla.
Y es que la pasta se prepara diariamente en la cocina del restaurante con los ingredientes más frescos y auténticos.
Algunas de las opciones incluyen tagliatelle y ravioli, cada una servida con salsas hechas en casa y auténticas.
Pero también puedes elegir una tabla de tostas (Misto di Bruschetta), Focaccia con guarnición (Focaccia di pinsa romana (13,80€) o un pastel de berenjena al horno con parmesano, salsa de tomate, huevo y salchicha fresca picada (Parmigiana di Melanzale 13,90 €).
Berenjena
Nosotros optamos por la berenjena -de la que somos fans- y estaba correcta, aunque, en nuestra opinión, el fondo estaba al límite de su liquidez.
Y aunque suene a términos económicos, lo que queremos decir es que le faltaba espesor o ligazón con el conjunto.
Cuando lo visitamos, Pagus estaba lleno y eso, unido a la pasión por la conversación que tienen los españoles hacía que, aunque agradable, la visita resultara algo ruidosa.
La sala tiene una «pecera» con horno y cocina a la vista y unos manteles de cuadros de trattoria tipica italiana.
Vitelo
Una de las recetas típicas de los restaurantes con este porte es el Vitelo Tonnato o Vitel Tonne (14,90€), una carne con salsa de atún que a nosotros nos chifla.
Este plato es típico del norte de Italia y aquí lo ejecutan a la perfección.
En carta también tienes distintas ensaladas Pagus, Calabrese y Caprese en una horquilla que va de 12,90€ a 14,90€.
Es curioso, y nos llamó la atención, que todo los platos, llevan los céntimos asociados al precio; ya sabéis para evitar el precio psicológico de referencia por aquello de que 12,90 parece más barato que 13 aunque solo haya 10 céntimos de diferencia.
Pasta
Y ya que la pasta fresca es uno de los reclamos del restaurante no pudimos resistir la tentación de probarla.
Cavatelli, caramelle, tortellaci, agnolotti…en esta parte de la carta todos llevan dos precios: el del plato, entre 12.90€ y 14.40€, y la sartén, que entendemos que es como ración y media, que está en torno a los 20€.
La pasta elegida fue el Trofie con tartufo y porcini, con crema de trufa, boletus y jamón ahumado (13,90€ el plato y 19,90 € la sartén).
La pasta estaba estupenda, y el plato rico, pero el supuesto sabor a trufa se había perdido por San Miniato, allá por la toscana italiana. (por decir algo)
Esto en lo que se refiere a las recetas de pasta Pagus (premium) porque luego está la zona de pastas elaboradas con recetas clásicas (14 variedades a un precio inferior).
En esta zona, elaboran unos rigatoni alla norma (12,90€) que tuvimos la ocasión de probar en nuestro último periplo por Sicilia con berenjena, tomate y requesón, pero que aquí no pedimos por si acaso.
Parrilla
Si te vas a la parrilla, cosa que, naturalmente hicimos, tienes distintos cortes de carne desde el lomo alto al solomillo, pasando por el chuletón y hasta el tomahawk donde la pieza puede superar los 50€.
En nuestro caso, y como no queríamos que la cuenta se desmadrara, probamos una Tagliata de entrecote; es decir, un lomo alto loncheado con sal gorda y romero (19,60€).
Postres
En resumen, y quitándonos el disfraz de gourmets, un restaurante razonablemente bueno -mejor o peor según donde pongas el listón- al que se puede ir a almorzar en la confianza de que vas a comer bien.
En cuanto a los postres, tiramisú, chocolate, nosotros le «dimos» a la crema de mascarpone (4,60€) que estaba en su punto.
Así que, quitándonos el disfraz de gourmets, Pagus es un restaurante razonablemente bueno -mejor o peor según donde pongas el listón- al que se puede ir a almorzar con la confianza de que vas a comer bien y de que los platos son abundantes.
Eso sí, si tomas vino -nosotros un Laya por 18,50€-, la cuenta puede superar los 45/50€ por persona sin despeinarte..
Nuestro menú
Entrante | Parmigiana de melanzale (berenjena) |
Entrante | Vitel Tonne |
Principal | Trofie y tartufo (pasta hecha a mano) |
Principal | Lomo alto al romero y sal |
Postre | Tiramisú |
Postre | Crema de Mascarpone |
Vino | Laya. Tinto |