Londres es una de las capitales europeas más visitadas y no solo para aprender inglés.
En las circunstancias actuales, y con el Brexit aún supurando, puede que acceder a su espacio laboral tenga más dificultades, pero una visita turística es otra cosa.
Lo primero que tienes que saber de Londres es que estamos ante una ciudad muy grande.
Por ese motivo, y porque los coches particulares pagan una tasa de acceso al centro, utilizar el trasporte público es lo más aconsejable.
En este transporte destaca el metro (el tubo), pero no siempre es fácil orientarse por la gran variedad de sectores y tarifas que tiene.
De la capital británica poco se puede añadir que no se sepa. Capital financiera y con 8 millones de habitantes, es lugar de concentración del poder económico.
Eso conlleva que sea una de las ciudades más caras del mundo, pero también una capital bien chula y emblemática que ha marcado y sigue marcando tendencia.
La comida es otra cosa. Mala hasta decir basta, no tiene por donde cogerse (al menos para un español) a no ser que quieras gastarte un buen puñado de libras.
Qué ver
Oxford Street
Esta calle y sus aledaños es la que concentra mayor número de comercios y tiendas de Londres.
Pero es que este pedrigrí le viene heredado desde la epoca de los romanos, ya que la calle sigue la ruta de un calzada romana que unía Hampshire con Colchester y llegó a ser el principal camino de entrada y salida de la ciudad.
Hoy no es lo que era porque ya no ofrece las últimas tendencias en moda, pero forma parte de un gran distrito comercial junto a Regent Street y Bond Street
De hecho, ha perdido su influencia con respecto a otra zona principal de compras en Londres como es Knightsbridge, donde se encuentran los almacenes Harrods.
London Eye
Cuando se instaló esta noria -la más alta del mundo, con 32 cábinas- nadie pensó en que su éxito serìa imitado por otras ciudades del mundo.
Pero el «ojo de Londres» es así. El «viaje· dura apenas media hora, pero en ese tiempo tendrás las mejores vistas de los principales monumentos de la ciudad.
Así que prepara el teleobjetivo porque te va hacer falta para fotografiar todo como Dios manda.
Ahora la noria está patrocinada, siguiendo el signo de nuestros tiempos, y se llama Coca-Cola London Eye , pero eso no debe ser impedimento para que disfrutes de la ciudad a 135 metros de altura.
Torre de Londres
La London Tower o Torre de Londres es, sin duda, uno de los monumentos mas visitados de la capital británica.
En su haber tiene casi 900 años de historia como palacio real y también como fortaleza y prisión…además de ser «la caja fuerte» de las joyas de la Corona.
Si quieres ponerte mas en modo época victoriana, entonces tal vez te apetezca hacer la visita guiada con los guardianes de la Torre, llamados Yeoman Warders.
Abadia de Westmister
Como otros edificios londinenses, la Abadía de Westmister, una iglesia a lo bestia, guarda cientos de secretos en sus salas y paredes.
Familia Real, poetas, militares, clérigos y hasta villanos, han paseado por sus pasillos.
Es el lugar donde se realizan las coronaciones inglesas -aunque hace muchos años que no se produce ninguna- y tiene 700 años de antiguedad.
Palacio de Buckingham y Big Ben
Y estando en Londres, cómo no vamos a recomendar dos de sus atracciones más emblemáticas: el palacio de Buckingham y el Big Ben.
Buckinhgham Palace es uno de los pocos edificios palaciegos que siguen en activo aún.
En verano, se puede visitar y recorrer los aposentos reales de la que es la residencia londinense oficial de la Reina y ver la exposición especial anual.
Por lo que respecta a la torre del Big Ben, símbolo de la puntualidad británica, fue construida en 1858 junto al nuevo Palacio de Westminster, (la casa del Parlamento).
El edificio tiene 106 metros de altura y es de estilo gótico con cuatro enormes relojes situados en cada una de sus caras.
Sin embargo, aunque cuando se habla del Big Ben nos referimos a la Torre del Reloj , en realidad el Big Ben realmente es una enorme campana de 14 toneladas que se encuentra en el interior de la torre.
Cambio de guardia
¿Y claro, como no te vamos a recomendar el cambio de guardia? Pero, cuidado, puede resultar un tostón porque dura 45 minutos.
La vista desde el Shard
Tampoco pierdas la oportunidad de ver Londres desde lo alto del edificio The Shard. Con 310 metros de altura, el edificio, situado en London Bridge, es el más alto de Europa occidental.
Castillo de Windsor
Windsor es la residencia y fortaleza de la monarquía británica.
Como en otros lugares ya mencionados, aquí lo que vale la pena son las obras de la Real Colección británica que se encuentran en las distintas estancias.
Uno de los objetos más famosas es la casa de muñecas de la reina María; y el lugar más emblemático, la preciosa Capilla de San Jorge.
Tower Brigde
Este puente levadizo de estilo victoriano fue lo que más nos llamó la atención -aparte del Big Ben y la Noria- la primera vez que fuimos a Londres.
Pues bien, años despuès y con visitas repetidas, nos sigue fascinando el puente con estructiras azuladas sobre el río Támesis.
Construído durante el siglo XIX, el puente levadizo estaba accionado por máquinas de vapor.
Su construcción duró ocho años, pero el puente y su exposición (con una tienda carísima) es la visita ineludible de este paseo por Londres.
Piccadilly Circus
La plaza de Piccadilly Circus es la Times Square de Nueva York, o al revés, más bien.
Aparte de ser un lugar de «quedada» de turistas y londinenses, es la que congrega mayor oferta de ocio.
Sus carteles luminosos y la fuente de Eros, situada en el centro, deberían ser reclamos suficientes para que no te la perdieras.
Como curiosidad, aquí está la famosa e inmensa sala de juegos Trocadero, bueno, eso si te gustan las maquinitas.(no es nuestro caso)
Trafalgar Square
Trafalgar Square es otra de las plazas famosas de Londres. Diseñada en 1830 tiene, en el centro, la famosa columna de Nelson (almirante) y en un esquinazo la National Gallery.
Un escarnio para los españoles porque conmemora la victoria de la armada británica frente a la española y la francesa en la Batalla de Trafalgar.
10 de Downing
Paseando y paseando por el centro de la ciudad es posible que te encuentres con esta calle.
Ya sabes, el nº 10 de Downing Street es la casa donde vive el Primer Ministro británico; es como si el Palacio de la Zarzuela estuviera en medio de la calle Goya de Madrid.
Catedral de San Pablo
La Catedral de St. Paul es la más importante de Londres. Anglicana, es la sede del obispado de la capital.
Está situada en Ludgate Hill, el punto más alto de la ciudad, y allí se han oficiado, entre otros los funerales de funerales de Horatio Nelson, del Duque de Wellington, de Winston Churchill y de Margaret Thatcher.
British Museum
En el Museo Británico destaca su colección del antiguo Egipto, (la mejor después de la del Museo Egipcio de El Cairo), y la de la Antigua Grecia.
Antes de la pandemia recibía 5 millones de visitas anuales, así que ya os hacéis una idea del trajín.
El museo se creó en 1753 y se abrió definitivamente al público el 15 de enero de 1759.
En 1801 adquirió una gran cantidad de antigüedades egipcias, entre las que se incluye la impresionante Piedra Rosetta (gracias a la cual se han podido traducir los jeroglíficos egipcios).
Una de las partes que merece la pena destacar es el Gran Atrio situado en el centro del museo, un enorme espacio con una cubierta de cristal en el que se encuentra la sala de lectura de la Biblioteca Británica.
Pepino (erótico?) de Norman Foster (Torre Swiss Re)
No es una atracción en sí misma, pero la torre Torre Swiss Re, apodada como el pepino erótico de Norman Foster es una de las curiosidades de la ciudad.
Localizada en el número 30 de St Mary Axe, es un rascacielos neofuturista de uso comercial ubicado en la City, el corazón financiero de Londres.
Con 180 metros de altura y 40 plantas, es el cuarto edificio más alto de la City y el noveno más alto de Reino Unido.
Candem
Decir Candem es decir mercadillo. Un pequeño viaje a Camden Town es como desplazarse hasta hippilandia o, dicho de otro modo, la cara alternativa de Londres.
Es una visita obligada si quieres conocer las tiendas más curiosas de la ciudad, probar comidas de todos los rincones del mundo o conocer las diferentes corrientes culturales que conviven en la capital británica.
Para ir a Camden Town hay que reservar al menos una mañana entera, ya que es una zona bastante grande, y lo y mejor es ir en domingo.
Harry Potter
El parque temático de Harry Potter es lo nuevo en Londres y, si eres fan de las novelas y películas de la escritora J. K. Rowling, aún mas.
Durante el Tour por la Warner Bros. Studio Harry Potter (que es como se llama) podrás visitar los decorados auténticos dónde se rodaron sus famosas películas .
Podrás entrar en el Gran Comedor de Hogwarts y recorrer el Bosque Prohibido.
La entrada al Studio Tour, en los estudios donde se crearon las ocho películas, cuesta 89 libras, casi 100€, pero si eres fan te encantará.
Más pistas
Lo que las guías no dicen
En Londres hay varias tarjetas que puedes adquirir para ahorrar algo de dinero en transportes y alguna de sus atracciones. Tres dias cuesta de media 120 libras.
Otra tarjeta es la Go London Explorer Pass que se rige por el acceso a 3, 5 o 7 atraccionesy no por días.
Asimismo, una buena forma de hacerse una idea gobal de la ciudad, aparte de subir al London Eye, es tomar un autobús turístico.
Podrás subir y bajar del autobús en cualquier punto del recorrido para visitar las atracciones que quieras o aquéllo que te llame la atención.
Lo que no te puedes perder
No pierdas la oportunidad de ver Londres desde lo alto del edificio The Shard a 310 metros de altura. Es el más alto de Europa occidental.
También puede ser agradable un viaje en barco por el Támesis, con comida o cena incuída.
Como monumentos y atracciones imprescindibles, además del London Bridge, nosotros destacariamos el Big Ben y el Parlamento, la torre de Londres, el castillo de Wesmister, la Tate Modern, el Museo Británico y el Barrio de Candem.
Comer y dormir
Ya hemos dicho que la gastronomía no es el punto fuerte ni de Inglaterra, ni de Londres, en particular. Y para muestra baste este botón de las delicatessen británicas:
- Fish and chips: Pescado frito y patatas fritas.
- Roast beef: Ternera a la brasa.
- Steak and kidney pie: Pastel relleno de ternera y riñones.
- Baked Beans: Tostada con judías.
- Apple Pie: Pastel de manzana caliente.
Así que, si quieres comer barato tendrá que ser fast food en forma de hamburguesa, kebab, chino o similar .
Como zona, quizá Covent Garden sea la más agradable con opciones de puestos callejeros y comida rápida ya mencionada.
De todos modos, te vamos a dar algunas recomendaciones que te pueden resultar útiles y que, obviamente, pertenecen a cocinas «no británicas«.
Este es el caso de Bao o de Paradise, uno es taiwanés y el otro sirve comida de Sri Lanka, por unos 35€.
Por lo que respecta a Italia , el más apañao es Padella (15 a 25 libras) y Trullo, También te recomendamos Smokestak, especializado en carnes y barbacoa. Estos dos últimos con precios entre 25 y 40 libras.
Españoles
Entre los españoles que han intentado hacer carrera allí destaca el Hispania London situado en el histórico edificio del Lloyds Bank (72-74 Lombard Street), coordinado por el chef Marcon Morán.
Otro de los españoles que marchó a buscar fortuna en Londres ha sido el chef vasco Eneko Atxa con su Eneko Basque Kitchen and Bar.
Y en versión más barata, aunque no exenta de calidad, tenéis Bar 61 y Barrafina…Por su echáis de menos el tapeo.
Michelin
A pesar de todo, la Guía Michelin tiene en gran estima a muchos de los restaurantes británicos de alta gama.
Para que os hagáis una idea, en Londres hay 53 restaurantes con una estrella Michelin, ocho de dos estrellas y cinco de tres estrellas. Pero los de una estrella rara vez bajan de100 libras.
Finalmente, y aunque suene raro, una opción que no debéis descartar es almorzar en el restaurante de unos grandes almacenes tipo Harrods, pero, claro, no es muy foodie.