Aún recordamos nuestro primer encuentro con el grupo de restauración español Sushita allá por 2013 cuando comenzaron a vender sushi en formato take away desde un pequeño local en el complejo de Telefónica en el barrio de las Tablas, Madrid.
Sin embargo, hoy cuenta con 6 restaurantes bajo las marcas Sushita Café, Madame Sushita, Monsieur Sushita y Le Club Sushita.
Pero hace pocos días, y a la espera de conocer Monsieur Sushita, y probar su fusión con la cocina marroquí, repetimos en el Sushita café de la calle Miguel Angel y se nota que el local sigue teniendo músculo.
Un poco de historia
Sushita comenzó sirviendo sushi en forma de take away y en córners de centros comerciales en 1999, pero tuvo el acierto dar el gran salto a la restauración, digamos, clásica.
Como hemos señalado, el primer local se instaló en uno de los bajos del complejo que telefónica tiene en el barrio de las Tablas, en Madrid.
Allí servían, tímidamente, menús para tomar «in situ» o para llevar a casa o a la oficina.
Desde entonces, ha llovido tanto que hoy lo forman una cadena de seis restaurantes situados en zonas estratégicas de Madrid.
El secreto de su éxito
¿Qué cuál es el secreto de su éxito? Pues aparte de servir un sushi notable a un precio ‘asequible’ y cocinado de mil maneras, la carta se ha ido extendiendo hasta territorios poco explorados como el mencionado marroquí de la calle Velázquez.
El restaurante de la calle Miguel Angel tiene dos alturas bien diferenciadas: con mesas de distintos tamaños, barra de take away y la propia cocina vista, aparte de unas lámparas ‘asiáticas’ que le dan el toque oriental imprescindible.
Además de su clientela fija, se da la circunstancia de que este Sushita recoge alguno de los comensales que llegan «rebotados» (por distintos motivos) de otro restaurante de fusión hispano japonesa cercano: el Umo.
En todo caso, en este local se respira ‘buen rollismo’ y el personal de sala se esfuerza por ser no solo amable, sino profesional con lo que gracias a sus consejos es sencillo navegar a ciegas por su carta.
Samosas, maki roll…
¿Por donde comenzar? Pues por donde quieras y, si te pierdes, el maitre te recomendará los más idóneo según tus gustos y apetito.
Nosotros comenzamos con unas samosas (empanadillas) de pollo de corral al horno con salsa de aguacate y lima (7.90€) que estaban correctas, aunque tal vez deberíamos haber optado por unos rollitos de pato o unos dumpling de pollo y gambas.
En carta también tienes ensaladas para compartir, maki roll, croquetas o dim sum, como los de kale.
Muy ricos los maki roll de salmón y setas (11.90€) y también la tempura caliente de unaci (10 piezas, 11,90€).
Este Unaci es una especie de maki roll de anguila en tempura y caliente (tranquilos que esta anguila no tiene textura de serpiente) que va acompañada de queso, aguacate, masago de naranja…un plato que llena, completo y riquísimo
También tienen otra tempura de gambones por 14,90€ para quienes son amantes de gambas y carabineros.
Especialidades
En el apartado de especialidades o platos estrella figuran el ceviche de lubina, el bacalao negro con salsa de miso, y los siempre socorridos tatakis de atún y de wagyu con salsa aji panka, ligeramente picante.
Sin embargo, el culmen del sabor es la tempura de gambas con chili dulce. Simplemente sensacional (13.90€).
Esta tempura de gamba roja siempre quedará en vuestra memoria gustativa, pero es probable que queráis probar el ceviche de lubina, que no de corvina.
Al ceviche le sobraba dulzor -quizá por los tomates cherry- y le faltaba el maíz, pero si no eres purista de este plato casi no notarás estas diferencias.
Nigiris
Pero queríamos más madera, y aficionados como somos a los nigiris, no pudimos resistirnos a pedir uno de pez mantequilla con trufa y otro de toro (ventresca de atún) con mostaza, muy meritorios ambos. (2,50€)
También los hay de vieira, lubina y hasta uno muy curioso de huevo de codorniz y chanquete.
Todos ellos sabrosos y consecuentes con lo que se espera de esta elaboración tan japo.
Se sirven por piezas a un precio medio de 2,50 euros, salvo el de carabinero que se va hasta los 6,50 y el increíble de wagyu en steak tartar, nigiri o hamburguesa.
En carta también hay un apartado para los noddles y arroces como los mie con langostinos o el arroz frito con pato.
Final feliz
Pero si quieres probar un bocado único (literal) entonces deberíais terminar con una mini hamburguesa (se toma de un bocado), por eso se llama hamgurguesita de wagyu con chili dulce. Impresionante.
Si terminas tu comida o tu cena con esto, mejor que te vayas directamente a los postres porque todo lo que pidas después quedará empañado por esta hamburguesita ‘chiquita, pero matona’.
En el apartado de postres, aparte de minipolos artesanos elaborados a base de fruta natural, tienes helados ecológicos como el hierbabuena o el del té verde.
En nuestro caso, nos decidimos por las tartas artesanales, y en concreto la de zanahoria (tamaño para dos), de ejecución correctísima.
No excesivamente dulce, nos gustó mucho, mucho, mucho.. casi tanto como el ‘aparatoso’ (porque se monta en la propia mesa delante de los comensales) crumble de manzana ; make your own apple crumble se llama en plato en carta .
Ambos dejan satisfecho al comensal en todos los sentidos, aunque si lo prefieres tienes merengue de frutas del bosque, el impertérrito brownie con pistachos, la tarta de limón, la de trufa negra o la mousse de chocolate templado (6,90€)
Nuestro menú
- Samosas (empanadillas) de pollo de corral al horno con salsa de aguacate y lima
- Maki roll de salmón y setas
- Nigiris de pez mantequilla con trufa y toro con mostaza de Dijon
- Ceviche de lubina
- Hamburguesita de Wagyu
- Tarta de Zanahoria
Sushita café. c/ Miguel Angel 11. Telf 918280204. www.sushita.com
***Shanghai mama, viva la diferencia