A solo unos 60 km de la capital, Málaga, y diez minutos de Nerja, Frigiliana observa, desde la montaña, el mar que moldea el clima de la Costa del Sol.
Situado en una ladera de la Sierra de Almijara, este pequeño pueblo de calles empinadas, casas encaladas y puertas de exposición, es famoso, gastronómicamente hablando, por su miel de caña de azúcar.
De hecho, la fábrica de este dulce está en el centro del pueblo y es visitable.
Pueblos bonitos
Y es que el hecho de estar incluido en todos los listados de los pueblos más bonitos de España le ha dado una notoriedad inusual.
Pero también ha provocado que el turismo de masas inunde sus calles según la época del año en la que vayas.
De todos modos, lo mejor es no perdérselo y pasear por sus callejuelas impolutas, pero antes no dejes de pasarte por la oficina de turismo donde te informarán de todo lo que necesites saber
Turismo
Allí podrás podrás coger un plano y además hacer tus primeras fotos de interés, ya que se halla junto a un mirador desde el que se ve el pueblo y el Mediterráneo.
Esta oficina está en la llamada cuesta del Apero, un poco antes de llegar al cogollo de Frigiliana; el lugar donde aparcan coches y autobuses.
Junto a la propia oficina podrás visitar la Casa del Apero el edificio del siglo XVII que alberga la Oficina de Turismo, la Biblioteca Municipal y el Museo Arqueológico.
Fábrica de miel
Reconocerás fácilmente donde está el centro del pueblo porque allí se encuentra el edificio de la citada fábrica de miel.
La plaza se llama de las tres culturas y el edificio es el Palacio de los Condes de Frigiliana.
Construido en el siglo XVII con los restos del castillo árabe de Frigiliana, es de estilo renacentista.
Alberga, como hemos dicho, la única fábrica de miel de caña de Europa y es conocido popularmente como «El Ingenio».
Calle Real
Desde aquí y siguiendo a la izquierda te encontrarás con la calle más importante del pueblo- la calle Real- que sirve de sistema circulatorio para todas las callejuelas, muchas en cuesta, que te encontrarás.
Suelos labrados en piedra, casas «ideales» y colores vivos en puertas y ventanas harán del paseo un cuento de hadas.
Apenas 50 metros más adelante verás que el camino se bifurca.
Barribarto
Si tomas la ruta de la derecha; la que tomamos nosotros, te adentrarás en el barrio morisco de Frigiliana (Barribarto).
Siguiendo por esta calle, verás unas inscripción en un callejón a la derecha, que te llevará hasta el Callejón del Peñón, que tiene alguno de los mejores miradores del pueblo.
No tiene pérdida. Este mirador está justo al lado de un restaurante que se llama The Garden.
Fuentes
Todas las calles son bonitas o muy bonitas, pero tal vez la más especial sea el Callejón El Garral.
Está lleno de macetas y plantas y conduce hasta la Fuente de las Tres Culturas con tres caños, cada uno presidido por la cruz cristiana, la estrella de David judía y la media luna musulmana.
Otra fuente emblemática, esta denominada Fuente Vieja, construida en el siglo XVII, se encuentra en otro de los rincones imprescindibles que ver en Frigiliana.
Antes de eso o después, según la ruta que elijas, habrás pasado por una plaza muy coqueta donde, aparte de terrazas para tomar algo, se encuentran la Iglesia de San Antonio de Padua, el Ayuntamiento y el Torreón.
La iglesia fue una antigua mezquita musulmana hasta que después de la reconquista fue transformada en iglesia de estilo renacentista.
Puertas
Pero lo más importante en Frigiliana es pasear sin rumbo fijo, disfrutando de su belleza y descubriendo puertas a cuál más bonita.
Encontramos «divertimento fotográfico» en eso; en las puertas, así que fotografiamos algunas de las que nos llamaron la atención.
Comer
Nosotros no nos quedamos a comer en Frigiliana porque continuamos viaje hasta Nerja, por eso no podemos recomendar ningún restaurante aquí.
Suponemos que si no exiges mucho nivel cualquiera de los que hay salpicados por el pueblo, incluido el The Garden, te servirán.
Sin embargo, si quieres saber lo que es bueno, desplázate a la cercana Nerja y busca el Bar Dolores el Chispa.
Allí, en el centro (nada de ir a los restaurantes para guiris del paseo marítimo) te encontrarás con esta taberna, con merendero, a la que próximamente dedicaremos un post.
Pero, para ir calentando motores, ya os decimos que si queréis comer espetos, salmonetitos, pulpo frito y otros platos de la cocina malagueña, este el el sitio.
Málaga centro
También podéis desplazaros hasta Málaga en la que disponéis de una amplia oferta aunque, si podéis, daros el gustazo de disfrutar en el estrella Michelin José Carlos García.
Asimismo, sin movernos del centro histórico de Málaga encontraréis un gran nivel de cocina en el restaurante 7 Cabezas.
Este restaurante, cercano a la calle Larios, tiene una historia truculenta digna de ser tratada en Cuarto Mileno, pero, sobre todo, se come de fábula.
En el reportaje que publicaremos sobre el tapeo en Málaga completaremos estas recomendaciones con otros lugares que seguro también te apetecerán.