Más nos valdría aprender de los dinosaurios

Las ventajas de ver los documentales de la 2

Un documental de la 2 me dió la idea. Había grandes similitudes entre el choque del gran meteorito que acabó con los dinosaurios y el golpe de la crisis económica de 2008, que ha acabado con la sociedad tal y como la conocíamos. En ambos casos, puede decirse que hubo un antes y un después.
El Deep Impact del meteorito cuyo cráter yace en el fondo marino, dejó esquilmado el Planeta porque después de cuatro días de oscuridad (lo mismo que ocurrió con las hipotecas basura en EEUU), todo vestigio de vida quedó asolado. Desde la hierba al plancton, lo que vendría a ser el trabajo, fue arrasado por el fuego y luego por el enfriamiento de la glaciación (que podría ser la falta de consumo).
En realidad, este asunto del meteorito y la desaparición de los habitantes más poderosos de la tierra, los dinosaurios, que la gobernaron durante 150 millones de años, podría ser ejemplo en las escuelas de negocio, si no fuera porque muchas de ellas han sido vivero de los directivos/meteorito que han chocado contra el Planeta Tierra.
Otra de las similitudes que me llamó la atención fue comprobar que después de aquel impacto ya nada sería como antes. Aquí hay gente que piensa que la crisis trae bajo el brazo la pérdida del estado de bienestar y tienen razón, pero no es menos cierto que más vale que nos hagamos a la idea. ¿Hay que rasgarse las vestiduras por ello? No lo creo. Hay que adaptarse. Esta es otra de las similitudes entre los animales del jurásico y nosotros. Pensadlo bien. Tras el impacto del meteorito gran parte de la vida (no toda) en la tierra desapareció, pero hubo animales que sobrevivieron. Curiosamente, los pequeños mamíferos (roedores, muchos de ellos) que hasta entonces eran alimento de los dinosaurios. Sobrevivieron los más pequeños, los más ligeros y los que supieron adaptarse. Igual que va a ocurrir ahora. Las grandes empresas periodísticas se hunden como los dinosaurios porque no han sabido adaptarse al medio, y lo mismo se puede decir de muchos de los trabajadores, que no quieren adaptarse a los nuevos tiempos.
Igual que ocurrió con los dinosaurios, nosotros no elegimos el impacto del meteorito, sino que él nos eligió a nosotros. Son cosas (ambas) ajenas a nuestra voluntad. Salvaron la vida los más prudentes, aquellos que, siendo pequeños, no quisieron buscar comida en territorio hostil (las inversiones ruinosas).
Como ocurrió con los incendios, la desertización y la glaciación del final del Jurásico, este es el medio en el que nos toca vivir ahora y hay que aceptarlo. El reportaje que vi no lo mencionó, pero los expertos mantienen que algunos dinosaurios sí que sobrevivieron al meteorito desarrollando alas para poder volar. Pesaban poco y eran diminutos, por lo que necesitaban poca energía para sobrevivir. Asimismo, podían desplazarse a grandes distancias a buscar comida y, como los mamíferos, empezaron a ser animales de ningún lado.
La sociedad, el trabajo, las pensiones, las empresas…ya no volverán a ser como antes. En otro tiempo la vida media de una compañía saneada era de unos 75 años, ahora apenas llega a 15 años. Es posible que hoy seamos periodistas, pero que mañana nos tengamos que reconvertir en informáticos, panaderos o empleados del hogar. No hay problema: ¡hagámoslo!
Y una última cosa. Ahora existen radiotelescopios que siguen la trayectoria de cometas y meteoritos para trazar sus órbitas y predecir un posible impacto conla Tierrra. Pero como en otras posibles crisis económicas que puedan acontecer en el futuro, podemos saber cuales son sus órbitas, pero no hay remedio aún para desviarlas y evitar el choque.
Por eso, más nos valdría aprender de lo que les ocurrió a los dinosaurios.

Un comentario en «Más nos valdría aprender de los dinosaurios»

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *