La Resaca del Mundial y el manteo a Manolo Escobar
Por Juan Manuel Barberá
Todo lo que hemos vivido estos días con la Selección española de fútbol ha sido increíble y yo he disfrutado como la mayoría del triunfo de un grupo de jugadores magníficos tanto en lo personal como en lo profesional que dieron un recital a pesar de la FIFA y sus árbitros, y a los tulipanes marrulleros.
Pero es hora de hacer balance de los actos de celabración (desde la visión de este forofo
del juego de la Roja que soy). Por ejemplo, me dio miedo el manteo que le dieron los jugadores al pobre Manolo Escobar que no sabía si en su mano portaba un Danacol o el micrófono. Lo vi con la mirada perdida en el cielo, buscando el carro que le robaron hace tiempo, mientras un grupo de individuos –como dijo Casillas– lo lanzaba al aire. Además, por culpa de ello descubrimos que el pobre Escobar cantaba en playback.
Tan pobre como los saltos que dio el presidente Zapatero en la recepción de Moncloa. ¿Por qué se agarra este hombre las mangas? Hay dos respuestas: una, porque es así de soso genéticamente; dos, porque se agarra la chaqueta para ensayar lo que van a quitar los taifas autonómicos cuando empiece a pedirles el apoyo a sus reformas.
La otra observación que quiero compartir con ustedes es la de los escasos bailes y parlamentos –ninguno, más bien– que se echaron los jugadores del Barcelona. Escondidos en el escenario, fueron los que menos participaron de la fiesta tal vez por miedo a que los nacionalistas les llamaran traidores. Yo que ellos lo hubiera celebrado a lo grande –si es que no tenían mala conciencia– porque de todas maneras los separatistas les han llamado vendidos y traidores.
Por último, quiero mencionar (con cariño) la escasa cultura que se atisba tras las declaraciones de nuestros futbolistas. Cierto que ganan mucho dinero y son casi dioses, pero son un ejemplo para los niños y tal vez por ello deberían buscar un poco de brillo intelectual. No digo yo que vayan a la Universidad, pero, hombre, subir un peldaño el nivel no les vendría mal. Es lo que les falta para ser tan perfectos como los jugadores de la selección de baloncesto o Rafa Nadal.
Cuando presencié en directo (estuve casi 48 horas pegada a la tele disfrutando de la victoria, cuando no estaba brincando en la calle como una posesa)el terrorífico manteo de Manolo Escobar, he de confesar que temí por su vida. No se si la gente fue consciente realmente de la facies de auténtico pavor que adoptó la criatura en ese momento de barbarismo para con un individuo de tan provecta edad, pero yo vi cómo sacaba los ojillos de sus órbitas, trémula la sonrisa y engarfiada la mano que sostenía el "danacol" (jajaja) con el que hacía la pantomima de cantar en directo.
Con respecto a Zapatillas, brincando como un don Tancredo de tan rígido que estaba, o como uno de esos muñequines a los que se les mete un tubito de goma por la retaguardia y por el que, merced a una perilla, se les insufla aire de forma intermitente para hacerlo saltar, quedé perpleja al ver que saltaba a destiempo de los que le flanqueaban. Ello, unido a la rigidez de sus brazos y su sonrisa MrBeaniana, mostró al mundo una imágen muy cómica, si no dantesca.
Enlace de obligado visionado:
http://www.youtube.com/watch?v=vV1qVEUd6qU&feature=fvsr
Lali
jajajaja, hacía tiempo que no me reía tanto. Y cuanto más lo leo, más me río. Que razon tienes….
Pobre Manolo y con esa chaqueta que saca en el anuncio del danacol que parece de su abuelo…de lo grande que le está