El pasado domingo, como ha ocurrido con el último domingo de noviembre desde hace 20 años, se celebró que Atapuerca fuera reconocida por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad en al año 2000.
Para quien no lo sepa, las excavaciones de Atapuerca están a unos 15 km. de Burgos y el yacimiento fue descubierto, por accidente, cuando se estaba construyendo una línea de ferrocarril.
Allí, tres expertos paleontólogos -y ahora codirectores del proyecto- Juan Luis Arsuaga, Eudald Carbonell y José María Bermúdez han conseguido reunir un equipo que cada año vuelve a las excavaciones buscando nuevos vestigios fósiles.
Los restos que se han ido encontrando pertenecen a los primeros hominidos que se asentaron en Europa hace, de momento, 1,3 millones de años.
Y decimos de momento, porque cada nueva excavación viene a reescribir la historia de la anterior, al menos en términos numéricos, y a completarla en el plano antropológico.
De hecho, en los primeros años se creyó que los primeros homínidos se asentaron aquí hace 500.000 años, pero después de casi 50 años de excavaciones se han encontrado restos que datan de 1,3 millones de años, como hemos señalado antes.
Reescribir la historia
Desde el punto de vista paleontológico y antropològico la historia de cómo éramos también ha ido definiendo comportamientos sociales a medida que se hacían nuevos descubrimientos.
Por ejemplo, y nivel grupal, se pensaba que nuestros antepasados abandonaban a los enfermos o ancianos cuando se desplazaban de un lado a otro.
Sin embargo, después se ha visto en enterramientos familiares, que cuidaban a sus enfermos y ancianos, y no les abandonaban.
Hallazgos como estos hay muchos, incluso los que tienen que ver con el conocimiento del fuego, por lo que, en cierto modo, cada nueva campaña hay que reescribir la historia.
Por eso muchas veces se dice que Atapuerca es como un libro sobre la
historia de los europeos que está lejos de concluirse.
Dónde está
La Sierra de Atapuerca se encuentra en el llamado Corredor de la Bureba, un pasillo geográfico que conecta la cuenca del Ebro con la del Duero.
Está situada a medio camino entre la Sierra de la Demanda al sur y las estribaciones de la Cordillera Cantábrica al norte.
Es un sistema kárstico, es decir está constituido por un nudo de galerías y conductos subterráneos de roca calcárea, sensible al desgaste del agua.
Eso ha facilitado la vida de distintos grupos de homínidos antecessor, heidelbergensis, neandertales y sapiens.
«Conocer, hacernos más humanos e informarnos del pasado, deberían permitir el nacimiento de una nueva conciencia de especie en el Planeta».
Eudald Carbonell, codirector de Atapuerca
Primeros europeos
Los yacimientos de la sierra de Atapuerca contienen numerosos vestigios fósiles de los primeros seres humanos que se asentaron en Europa.
Vestigios que constituyen una fuente excepcional de datos, cuyo estudio científico proporciona información inestimable sobre el aspecto y el modo de vida de esos antepasados remotos de nuestra especie.
Pero bien es cierto que los restos encontrados comenzaron a tener especial relevancia científica a partir del hallazgo de los restos de la Sima de los Huesos en 1992.
Dos años más tarde se hallaron los restos humanos (de más de 850.000 años) que definieron una nueva especie conocida como Homo antecessor.
Especies de homínidos
Hasta la fecha, los yacimientos de la sierra de Atapuerca se han encontrado evidencias de cinco especies de homínidos
Homo sp. (aún por determinar, 1.300.000 años), Homo antecessor (850.000 años), preneandertal (500.000 años), Homo neanderthalensis (50.000 años) y Homo sapiens.
Por otro lado, el Equipo de Investigación de Atapuerca (EIA) cada verano trabaja en los siguientes yacimientos:
- El Complejo de La Trinchera del Ferrocarril
- La Cueva fantasma
- El Complejo Cueva Mayor/Cueva del Silo
- El Complejo de Cueva del Mirador
- Y los Asentamientos al aire libre
Muchas preguntas
Por eso, cada año y después de cada excavación, surgen nuevos hallazgos que ponen al grupo de investigadores, paleontólogos, antropólogos, biólogos, botánicos….que trabajan allí en una excitante encrucijada.
Algunos de estos descubrimientos deberían ser tenidos en cuenta por la sociedad actual porque como dice Arsuaga: «Los humanos no tenemos ninguna misión especial en este mundo».
«Los antropólogos somos constructores del pasado»
Juan Luis Arsuaga, codirector del proyecto Atapuerca
Sima de los Huesos
La llamada Sima de los Huesos es, probablemente, donde se ha encontrado mayor acumulación de fósiles del Pleistoceno Medio.
Allí se produjo uno de los descubrimientos más importantes: la apariciòn de la conciencia humana.
A través de lo que puede ser la primera práctica funeraria de los Homo heildebergensis, se encontró un foso con varios cuerpos acumulados junto a los cualés se había arrojado una herramienta de piedra.
Esta herramienta estaba tallada sobre una cuarcita roja y marrón.
Los descubridores la bautizaron como excalibur, y se acepta que esta ofrenda representa el inicio de la conciencia humana y la conciencia como especie.
Homo antecessor
Uno de los mayores descubrimientos en los años 90 fue poder definir al Homo antecessor como nueva especie del género Homo.
Se creía que este homínido podría ser el primer poblador de Europa hace unos 850.000 años.
Sin embargo, en 2007 se encontró la mandíbula de otro ejemplar que vivió en la que hoy es la provincia de Burgos hace 1,3 millones de años.
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«La evolución del nicho Homo solo se concibe desde la evolución de la complejidad de la técnica.
José María Bermúdez, codirector de Atapuerca
La técnica
En lo que respecta a los avances técnicos, fueron muy importantes para la evolución de los homínidos, y también determinó su selección natural; es decir, que unos sobrevivieran y otros no.
Sin embargo, algunos expertos opinan que el largo proceso de humanización de los homínidos terminó con la aparición del Homo sapiens (nuestra especie), hace unos 100.000 años, y que la técnica también tuvo mucho que ver en este parón.
Técnica que no forma parte de nuestro cuerpo, pero que es un rasgo humano con un orígen biológico que podría definirse como cultura.
Y es que, durante miles de años, estos avances técnicos se utilizaron para procurar la evolución de la especie; es decir, para producir un efecto beneficioso colectivo.
Pero la pregunta final que debemos hacernos, como humanos sapiens, es si esa búsqueda de beneficio común sigue vigente en 2021.
Porque, de no ser así, la humanidad entera estaría en riesgo y, más allá de intereses politicos y económicos, deberíamos replantearnos de forma urgente nuestro futuro y forma de vida.
Algunas conclusiones básicas extraídas de Atapuerca
- El estudio de la dentición y la morfología dental ha sido definitiva para averiguar como vivían, su alimentación y hasta el comportamiento de los homínidos de Atapuerca.
- El Homo heildebergensis fue antepasado de los neandertales, que no tiene nada que ver con el Homo sapiens
- Los homínidos descubrieron el valor de la comida para pensar, reproducirse y organizarse (sorprende, por ejemplo, que usaran palillos para limpiarse los dientes)
- Una de las mayores conquistas de estos prehomo sapiens fue la prolongación de la niñez con el destete de los niños a los tres años de edad.
- Se desconoce cómo llegaron a la conclusión de que la leche materna protegía el siste inmune de los niños.
- Los homínidos de Atapuerca sabían que cuidar a la descendencia aseguraba la supervivencia de grupo.
- La edad media de vida de uno de estos ejemplares de Homo estaba en unos 40 años.
- Las herramientas permitieron la caza, y ésta un mayor consumo de carne, que junto al incremento de la supervivencia infantil contribuyó al aumento de la capacidad craneal.
- El lenguaje simbólico (el habla para comunicarse) surgió hace tan solo 40.000 años
Mas pistas
Lo que las guías no dicen
Para hacer la visita guiada a los yacimientos de Atapuerca y al Centro de Arqueología Experimental es necesaria la reserva previa.
Lo que no te puedes perder
En cuanto a qué ver en este viaje, aparte de los yacimientos, es interesante el Centro de Arqueología Experimental, Atapuerca Espeleo y Atapuerca Natural; estos dos últimos, muy indicados para los niños y niñas.
Además de eso, es obligada -en Burgos- la visita al Museo de la Evolución Humana.
Situado en el centro de la capital, pero en la orilla opuesta al casco histórico, está dividido en cuatro plantas.
Una de ellas está dedicada a la Sierra de Atapuerca y la evolución humana; otra a la evolución en términos biológicos; la evolución en términos culturales:hominización y humanización, y a los ecosistemas de la evolución.
Comer y dormir
En Burgos hay distintos hoteles de calidad donde poder pernoctar, pero si hay que elegir uno, por situación y modernidad, os recomendamos el Silken Gran Teatro.
‘Fashion’ a más no poder, su situación, al lado del río, muy cerca del centro -pero alejada del bullicio- y frente al Museo de la Evolución Humana, es otra de sus claras ventajas.
En cuanto a lugares donde comer, se pueden tomar ricas tapas y vino en los bares y mesones que salpican la parte vieja de la capital, pero si visitais Atapuerca también se puede almorzar cerca de los yacimientos, en el pueblo de Atapuerca o en Ibeas de Juarros.
En Atapuerca hay una restaurante que se llama Comosapiens (como el programa de la 1 de RTVE que, claramente, ha copiado el nombre del restaurante) y está a la entrada del pueblo, a la izquierda.
Tiene un «menú comosapiens» por 25 € que se sirve sábados, domingos y festivos, y que es muy apañao.
Sin embargo, para los más sibaritas, os recomendamos desplazaros hasta Burgos, al restaurante La Fábrica (20-50€), con su joven chef Ricardo Temiño al frente, que está siendo la sensación de la ciudad.
Por otro lado, si quereis algo más informal, entonces es muy recomendable la taberna La Favorita, tradicional, mítica y con una relación calidad precio imbatible (2-18€).
El ir a Atapuerca a ver aunque sea de lejos las excavaciones y absorver el paisaje transportándonos a un pasado heroico, ya por sí, es una idea emocionante, casi alucinante. Pero ustedes y su promoción de los lugares a visitar en especial como sitio distinguido el Museo de la Evolución Humana y otros y de los lugares para la supervivencia turística, sobre todo las tapas, convierten esa idea en obsesiva. Viajaré desde las Américas a disfrutar de ese viaje a Atapuerca de seguro.
Un saludo fraterno de Sapiens a Sapiens a quienes hacen posible esta ilusión.
Gracias por tu comentario, Sonia. Y espero que, cuando vengas a España, lo disfrutes