Este año, el motivo central de la propuesta es Ho`Oponopono, una tradición milenaria de origen hawaiano que significa que  basta un perdóname, un te amo y un gracias para que todo cambie y poder comenzar de nuevo.
Y es que la armonía que proponen en este fantástico hotel pasa por una oferta gastronómica de gran nivel, que alcanza su ‘culmen’ en Santceloni con el chef dos estrellas Michelin Óscar Velasco, y que está perfectamente representado en el restaurante La Gran Manzana por Estéban González. 
En las diversas propuestas de esta año habrá cena de Nochebuena, brunch de Navidad, cena de Nochevieja, brunch de Año Nuevo, y cena de Reyes, además de la tradicional Gran Cena de Nochevieja en Santceloni.
Nosotros probamos un mix de platos que componen el menú que van a peparar para Nochevieja y Nochebuena. 
Este es el caso de la cigala asada con su consomé. ñoqui de piel de patata asada y boletus edulis, armonizaza con un vino blanco Jean Leon Vinya Gigi Chardonnay 2014. Un gran entrante que no era sino la antesala del plato estrella: el morrillo de atún rojo al sarmiento con confitura salada de pescado de roca, coliflor y uva a las brasas que, además fue armonizado con un extraordinario vino californiano: el Marimar Estate Chardonnay también de 2014. 

 

Hawai inspira el menú del Hesperia

Casualidad o no (que coincidieran el plato y vino más destacados) el caso es que este atún rojo lo borda Esteban González. Seda pura, se deshace a cada paso por la boca. Sabroso, pero en su punto justo, podemos decir que es uno de los morrillos de atún rojo mejores que se pueden tomar en Madrid. La técnica, absolutamente depurada y reconfirmada en su elaboración, hacen de él un plato estrella del restaurante La Gran Manzana y su homónimo asiático en el mismo hotel. Este plato pertenece al menú de Nochebuena.

morrilo de atún

Pero volviendo a la oferta culinaria de Nochevieja, el chef nos llevó hasta el cordero lechal con glaseado de calabaza, jugo de hierbas aromáticas y creme fraiche, que también es una auténtica delicia, tanto por la composición de los elementos, como por el ensamblaje de los mismos guardando la armonía más absoluta. El cordero siempre es una carne que tiene su aquél, pero González resuelve el problema sin inmutarse. El viña Pomal 106 Barricas reserva 2011 tinto también era de categoría y la armonización perfecta para este exquisito plato.

jardín de navidad

Finalmente, cada año, en los postres, la imaginación de los inspiradores de esta propuesta gastronómica no tiene límites. y en este caso fue un jardín de navidad -completamente comestible, por supuesto- que contenía todos los elementos para divertirse y disfrutar y la evolución de la uva que se servirá en Nochevieja.

las cenas de nochebuena y nochevieja

Hasta aquí las palabras del cuerpo pronunciadas y expresadas por González en cada plato, pero para ser justos y seguir la tradición hawiana, tampoco podemos olvidarnos del alma. Así que las palabras del alma, como dice la tradición Ho’Oponopono, son te amo (aloha es amor), E kala maioe iaua (perdóname) y mahalo (gracias ), y nosotros añadimos Mele kalikimaka (feliz navidad) y Hauoli Makahiki Hou (próspero año nuevo)…y a hui hou (hasta que nos volvamos a ver).
Hotel Hesperia Madrid. Paseo de la Castellana 57. Madrid. telf. 912108800. www.hesperia-madrid.com