Y es que, si todavía os quedan ganas de darle a las tablas, pero de verdad, aún estais a tiempo de disfrutar. Asimismo, y como en otras estaciones, Astún también cuenta con un área denominada Snowpark/Freestyle pensada para todos aquellos que no se conforman con practicar esquí alpino y prefieren otras modalidades como el snowboard o poner en práctica sus más novedosas técnicas de Freestyle en un entorno de total seguridad para todos los esquiadores. Este área, que se creó la temporada pasada, ha visto esta temporada ampliada su superficie dada la gran aceptación que tuvo entre los esquiadores menos convencionales.

Y a mi también me gusta que haya zonas acotadas para el snow porque el asunto, y no quiero cargar mucho las tintas con esto, es que dada la edad de quienes suelen practicar snow y su amor por el riesgo sin control, puede suponer un problema para el resto de practicantes del esquí y un riesgo muy elevado para los niños. Este tema, el de la incompatibilidad del esquí con el snow más extremo, es un contratiempo general de todas las estaciones de esquí en el mundo.

Pero Astún también ha pensado en los pequeñines y por eso dispone de un Jardín de Nieve, niños de 1 a 6 años, que ofrece un espacio para que jueguen y comiencen a disfrutar del contacto con ella. Abierto en horario de 9 a 16.30, sus monitores organizan juegos colectivos e individuales, tanto motrices como estáticos que fomentan su participación y su capacidad de desarrollo en un entorno agradable, distendido y cálido.

Este es, sin duda, un acicate para que ningún componente de la familia se quede sin tocar la nieve, pero también hay ventajas económicas, puesto que a la hora de comprar los forfaits y los abonos de temporada, las familias tienen beneficios, así que os aconsejo consultar en taquillas o en la web antes de comprarlos.

Por lo que respecta a las pistas, el telesilla de las Truchas os llevará hasta los 2.600 metros de cota para descender con un desnivel de 425 metros, que se queda corto si os aventurais por el remonte que lleva a la Raca donde el desnivel sube hasta los 550 metros. Como creo que he comentado, las pistas azules de Astún tienen muchos tramos rojos, por lo que –si quieres- tienes bajadas vertiginosas que confluyen en la misma cara del valle. Es decir, que si todos los caminos conducen a Roma, en este caso, todos los caminos conducen a la base de la estación.