Ciudad Rodrigo: murallas y farinato en Salamanca

Ciudad Rodrigo tiene el monumento más rico erigido en nombre de la gastronomía …y el colesterol: el farinato.

Tal es la fama de este embutido que no hay tienda o restaurante que no lo oferte en su carta.

Por otro lado, Ciudad Rodrigo posee los títulos de Ciudad Antigua, Noble y Leal; y está más cerca de Portugal (25 km.) que de la capital de su provincia, Salamanca (86 Km.)

Esta situación fronteriza marca de forma definitiva no sólo el carácter de sus gentes sino, sobre todo, el paisaje.

Y es que al otro lado, poco después de cruzar los restos de la antigua frontera, se encuentran muchas joyas: desde los Arribes du Douro, portugueses, al impresionante pueblo de Sortelha; una auténtica joya medieval que es imprescindible visitar.

Sortelha, en Portugal

El gentilicio de los paisanos de Ciudad Rodrigo es el de mirobrigense, aunque amistosamente se les llama farinatos en honor al embutido típico ya mencionado.

Farinato que, dicho sea de paso, bajo un lecho de patatas fritas y huevos, es uno de los manjares más ricos que se pueden tomar.

Untuoso, potente y consistente, es perfecto para sobrevivir a las temperatuas gélidas de estas tierras.

Un poco de historia

El actual emplazamiento de Ciudad Rodrigo, un cerro rocoso a orillas del río Águeda, estuvo poblado ya desde el Neolítico.

Hacia el siglo VI a.C., los vetones, tribu de origen celta, fundaron la ciudad de Miróbriga y se establecieron allí.

Cuatro siglos después, los romanos conquistarían la ciudad, que pasó a llamarse Augustóbriga, en honor del emperador Octavio César Augusto.

Tras ser objeto de disputas entre árabes y cristianos durante siglos, esta plaza fuerte fue repoblada en el año 1100 por el conde Rodrigo González Girón, quien le dio su nombre definitivo.

Patrimonio

Ciudad Rodrigo cuenta con monumentos muy importantes y en el año 1944 fue declarada Monumento Histórico-Artístico.

Hablamos de un ciudad amurallada, posee una preciosa catedral, iglesias, palacios y casas solariegas de gran valor arquitectónico.

Además, cuenta con un Parador Nacional de Turismo, ubicado en el castillo de Enrique II de Trastamara, que es una maravilla no sólo para alojarse en él, sino para visitarlo como un monumento más.

Qué ver

Aparte de las murallas, tienes que ver la casa de los Miranda y la casa de la cadena.Asimismo, tiene valor cultural y artístico la Plaza Mayor.

Otros de sus tesoros es la Catedral de Santa María, de estilo románico y gótico, que alberga al museo catedralicio y desde luego el propio recinto amurallado medieval.

La esencia

  • Castillo de Enrique II. Mandado construir por el rey Enrique II en el año 1372. En la actualidad es el Parador Nacional.
  • Catedral de Santa María: del siglo XII al XIV. Iniciada bajo el reinado de Fernando II de León es románica en transición al gótico.
  • Murallas: comenzaron a ser construidas por Fernando II de León en el siglo XII y tienen más de dos kilómetros de perímetro. Cuenta con cinco puertas, la del Sol, la del Conde, la de Amayuelas, la de Sancti Spiritus, la de la Colada y la de Santiago.
  • Palacio de la Marquesa de Cartago: de estilo neogótico, construido a finales del siglo XIX y reformado en 1953.
  • Capilla de Cerralbo: de estilo herreriano (siglos XVI y XVII). Construída «para hacer sombra a la catedral» como panteón funerario de la familia Pacheco,
  • Ayuntamiento: del siglo XVI y estilo renacentista.
  • Casa de la Cadena: casa señorial del siglo XVI. Ha sufrido diversas reformas al ser usada desde la Guerra de Sucesión como cuartel.
  • Casa de los Vázquez: casa señorial del siglo XVI, de estilo gótico. Actualmente alberga las instalaciones de Correos y Telégrafos.

Más pistas

Lo que las guías no dicen

Pernoctar en el parador de Ciudad Rodrigo nos trasladará al medievo. El palacio es realmente bonito y está muy bien conservado.

Farinato «en vena»

Comprar Farinato, por supuesto, es obligado, además de probarlo allí en alguna de sus famosas sartenes con huevos fritos y patatas.

Eso sí, os recomendamos que no lo toméis para la cena porque podéis tener peleas con la almohada y dificultades para dormir.

Lo que no te puedes perder

Si tenéis tiempo, es muy aconsejable una visita al precioso pueblo de la Alberca (Mogarraz, también mola y está muy cerca) y una subida a la Peña de Francia para aislarte del «mundanal ruido».

El famoso pueblo de la Alberca

Tampoco debes perderte un paseo/crucero por el río Duero en uno de sus barcos acristalados. Cargarás las pilas, sin duda.

El barco de los Arribes del Duero

Comer y dormir

Para dormir ya hemos señalado que el mejor lugar es el Parador de Ciudad Rodrigo, y para comer lo cierto es que no hay ningún restaurante espectacular, aunque el mas famoso es la Muralla.

Restaurante La Muralla

Sin embargo, otras dos buenas alternativas en la ciudad, y a precio menor, son la Canóniga y, sobre todo, Zascandil.

En la provincia, el restaurante top está en el pueblo de San Miguel de Valero y se llama Sierra Quilama (30 €) y en Mogarraz, Mirasierra (20€)

Además de estos , y ya en la zona portuguesa, cerca de Sao Miguel Da Guarda, tenéis Aquarius (30€), y, sobre todo, en Covilha Sao Martino, Taberna A Laranjinha (30€).

2 comentarios en «Ciudad Rodrigo: murallas y farinato en Salamanca»

  1. Muy cerquita está Monsagro, con su Ruta de las Huellas Fósiles y el Museo de los Mares Antiguos.
    Impresionante

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